Published on septiembre 19th, 2020 | by lavozsur
0*Los Infortunios de la Política Regional
Los partidos políticos se han vuelto una empresa y en el Sur de Jalisco está la muestra más clara de ello, donde sus dirigentes se desempeñan como gerentes en lugar de ocupar su labor de representantes populares.
Ésta lamentable situación ha contaminado a todos los organismos políticos, incluso a las nuevas organizaciones que ya no se presentan como partidos sino como movimientos… ahí está el caso del Movimiento de Regeneración Nacional y el Movimiento Ciudadano, que dan y quitan nombramientos a conveniencia, como si fuera un asunto de compra-venta, al igual que con el reparto de cargos públicos.
Por eso cuando vemos como ambas instituciones distribuyen puestos en diferentes dependencias al primo, al cuñado, al sobrino o al compadre hay que aclararles que deben tener tantita pena y no utilizar sus nombramientos como si fueran botín a repartir.
Luego está la parte del desempeño, donde resulta irónico cuando los tres diputados que representan al Distrito 19 vienen a decir que están trabajando duro por la región, como la legisladora Elizabeth Alcaraz que en el informe del alcalde José Guerrero afirmó un “vamos a seguir ayudando a Zapotlán” cuando ni a su pueblo natal y que es gobernado por su propio hermano le ha brindado su apoyo.
También está el caso de la panista Claudia Murguía, que presume una millonaria gestión de recursos, pero solamente para los municipios gobernados por Acción Nacional como son Zapotiltic y Valle de Juárez.
Del representante federal también hay que mencionar que la gestión ha sido muy reducida, pues como ya todos sabemos el gobierno federal retiró los recursos para el Ramo 33, que eran destinados a la implementación de obra pública en el interior del país y los cuales, por cierto, los diputados acostumbraban cantar con bombo y platillo.
Y es precisamente por esos motivos que la próxima elección va a ser muy complicada en diferentes aspectos, primero porque se ha reducido el tiempo de campaña a un mes solamente; segundo, porque aún habrá rastros de la pandemia y tercero, sobre todo, porque todas las marcas de representación política han tenido un tremendo desgaste y como dicen las voces populares: “ni a cuál irle”.
Unos salieron mentirosos; otros ponen pretextos y dos años después le siguen echando la culpa a sus antecesores; otros más han resultado verdaderos inútiles que solo quieren seguir viviendo del erario público y los que más, están envueltos en escándalos de corrupción.
Así de desafortunada es en la actualidad la política nacional, estatal y regional… donde se ha perdido, desde hace mucho, el deseo de servir e impulsar a los pueblos. Hoy la meta es servirse a manos llenas, conseguirle chamba a los amigos y parientes y cobrar enormes sueldos sin acudir si quiera al sitio de trabajo.