Published on octubre 11th, 2024 | by lavozsur
0Inundaciones y Descuido en Carreteras
Las inundaciones en la carretera libre no pueden ser una simple casualidad, pues año con año el nivel del agua en esa vía se ha ido incrementado y ello se debe a la tala inmoderada en la parte alta de la montaña, donde las principales causas son sin duda alguna, la agricultura protegida y el incremento de fraccionamientos y cabañas.
Y es que ya lo hemos repetido en ocasiones anteriores, si bien la agroindustria ha traído a la región un auge económico que de otra forma difícilmente podría ser alcanzado, también ha provocado una terrible degradación social que está derivando en violaciones, maltrato y brutales homicidios, pero además, hay un grave daño ecológico que poco a poco la propia naturaleza ha ido señalando desde hace algunos años… ahí está el desbordamiento del río Salsipuedes en San Gabriel, ahí están hundimientos y deslaves en las carreteras y ahí están los daños a la salud de cientos de trabajadores que prestar sus servicios en los campos del Sur de Jalisco.
En esta ocasión, vamos a enfocarnos a los acontecimientos más recientes, pues en los últimos dos meses, la carretera libre Guadalajara-Colima ha quedado bloqueada en tres ocasiones por el desbordamiento del río Agua Zarca, al tiempo que las carreteras estatales y federales han sufrido deslaves y hundimientos en prácticamente todas las rutas de nuestra región.
La carretera federal Jiquilpan-Manzanillo, que cruza municipios sureños como Pihuamo, Tecalitlán Tuxpan, Zapotiltic, Tamazula de Gordiano, Mazamitla, Valle de Juárez y Quitupan, se encuentra prácticamente destrozada; en todos los municipios mencionados hay enormes baches que ya han causado accidentes mortales y en sus zonas de montaña continuamente tiene deslaves que bloquean la circulación en uno y hasta los dos carriles de circulación.
Por otro lado, la carretera estatal 429 que comunica a Ciudad Guzmán con El Grullo, a pesar de que hace unos años fue objeto de importantes inversiones para su restauración, hoy está completamente llena de baches y cada vez que llueve, abundan los deslaves en las zonas de montaña.
Una de las de mayor circulación en nuestra región es la carretera estatal 401, que corre de Acatlán de Juárez a Colima, y que hoy en día presentan hundimientos, agrietamientos y baches en la mayor parte de su trayecto.
Pero no solo eso, pues el tramo comprendido entre Sayula y Amacueca se ha inundado en tres ocasiones en los últimos dos meses por el desbordamiento del río Agua Zarca, que se encuentra en los límites de Tapalpa, Sayula y Amacueca, provocando que la carretera sea cerrada a la circulación ya que decenas de vehículos han quedado varados.
En este asunto, hay una serie de factores que se conjugan, en primer lugar, no podemos dejar de mencionar que el temporal de lluvias ha sido muy copioso este año, lo que ha estado provocando deslaves e inundaciones, como ocurre en el río Agua Zarca, cuyos escurrimientos bajan hacia la laguna de Sayula.
Sin duda alguna, está también el descuido de las autoridades, que no han tenido la gracia de solucionar ese problema de inundación y mucho menos de realizar labores de bacheo en las carreteras de la región.
Habrá que ver si los nuevos gobiernos, municipal, estatal y federal ponen atención en las carreteras sureñas, pues el mal estado en que se encuentran dificulta las actividades productivas y sobre todo, ya han cobrado varias vidas en los últimos meses.