Published on agosto 14th, 2021 | by lavozsur
0Conflicto en la Universidad, Negocios y Salud
Nuevamente la Universidad de Guadalajara y el Gobierno del Estado se están enfrentando por un conflicto de intereses económicos, en el que desafortunadamente, la máxima casa de estudios de Jalisco deja en claro que la educación y la salud no son precisamente sus prioridades.
Y es que hace unos días el Congreso de Jalisco aprobó por mayoría cambiar el destino de 140 millones de pesos que se tenían etiquetados para la construcción del Museo de las Ciencias Ambientales y utilizarlos para la construcción un Hospital Civil en Tonalá.
La medida provocó una serie de reacciones e incluso por instrucción de sus superiores los empleados de la casa de estudios dicen estar trabajando bajo protesta, pero es claro que no están tomando en cuenta la grave emergencia de salud por la que atraviesa Jalisco, 300 mil infectados por Coronavirus hasta la fecha y más de 13 mil muertos, así como los hospitales al cien por ciento de su capacidad dicen a gritos que el tema sanitario es la prioridad en este momento.
Pero en la Universidad no lo han querido entender e incluso el rector Ricardo Villanueva anunció que se retirará de este espacio de trabajo, y hay que decirlo bien claro, en Jalisco no es momento de hacer berrinches.
En este conflicto, tanto el gobernador de Jalisco como los diputados del Congreso Local solamente se han concretado en decir que son “otras personas” quienes buscan crear conflicto donde no lo hay, pero hay que decirlo bien claro, la Universidad de Guadalajara tiene dueño y quien se ha molestado por esta reasignación de presupuesto es Raúl Padilla.
Como era de esperarse los “dueños” de la máxima casa de estudios de Jalisco pusieron el grito en el cielo y de pasadita soltaron a los perros para que defiendan y busquen recuperar esa lana cuya finalidad será la salud de los jaliscienses.
No debemos olvidar que bajo el argumento de la educación y el fomento a la cultura los Padilla han hecho jugosos negocios como el Auditorio Telmex, la Feria Internacional del Libro, el Festival Internacional de Cine, el Hotel Villa Montecarlo y muchas empresas más que forman todo un corporativo construido al cobijo del dinero público.
Mientras tanto, todos los años, miles de muchachos ven esfumarse sus esperanzas de recibir educación superior, pues de los 54 mil 335 aspirantes a alguno de los 126 programas de educación superior en la Casa de Estudios, sólo 18 mil 162 logran ser admitidos.
No hay cupo suficiente, se argumenta, porque la Universidad no dispone de recursos suficientes para ofrecer más espacios. Desde hace una década sólo entran a la Universidad de Guadalajara, en promedio, 40 de cada 100 jóvenes que aspiran a cursar una licenciatura.
También debemos decir que entre 2010 y 2015 el presupuesto de la Universidad aumentó en 3 mil 56 millones 373 mil 822 pesos. Y entre 2010 y 2019 el aumento presupuestal fue de 6 mil 257 millones 364 mil 217 pesos. Una impresionante alza del 83% en los últimos 10 años. Pero aun así no hay cupo suficiente para los jóvenes que demandan ingresar a sus aulas para cursar una licenciatura.
El mejor ejemplo que podemos citar es el del calendario 2021-B en el Centro Universitario del Sur, donde solamente se aceptaron a 914 alumnos de 2 mil 288 aspirantes a las carreras que ofrece esta casa de estudios, vale decir, menos de la mitad podrá acceder a la educación superior.
Así las cosas, si los jerarcas de la Universidad prefieren dar prioridad a centros culturales o de espectáculos en vez de a los espacios educativos, esperemos que en esta ocasión entiendan que la salud de los jaliscienses está por encima de todas las cosas, sobre todo en estos días en que la pandemia del Coronavirus se está expandiendo de forma alarmante.