Punto por Punto, Sábado 29 de octubre de 2016
*En Zapotlán las malas acciones casi no se cuentan, pero cuentan mucho.
Así con el mismo rechazo que ha causado el presidente Enrique Peña Nieto en tres años de gobierno, Alberto Esquer en sólo un día puso contra su persona y la de su esposa a todo el pueblo de Zapotlán y a todos sus sectores.
Fueron sólo dos medios los que contaron las malas cosas, La Voz del Sur de Jalisco y Radio Universidad, pero quien inició la denuncia fue un joven egresado de la carrera de Periodismo, que con su celular y utilizando los medios a su alcance denunció el abuso de autoridad.
La noticia cobró tal magnitud que más de 150 mil personas se enteraron del asunto y un muy importante porcentaje emitió comentarios negativos sobre el actuar del presidente municipal, que por un descuido de su esposa extravió su teléfono y decidió catear un puesto ambulante donde la aplicación “Buscador iPhone” le indicaba que estaba su dispositivo.
Luego vino una cruel venganza contra el vendedor ambulante al cual, en el que pudo ser el mejor día del año en cuanto a ventas, le desmantelaron su puesto y le prohibieron comercializar sus productos.
Y así, mientras el pueblo de Zapotlán externaba su molestia por lo que calificó la peor feria en la historia, al Ayuntamiento se le vino encima una tremenda crisis de gobierno que ahora tiene envuelto a su titular en demandas legales y de derechos humanos, situación que seguramente no pasará a mayores debido a la ineptitud de la Comisión Estatal de Derechos Humanos y a las trabas del Nuevo Sistema de Justicia Penal, pero que afecta seriamente la imagen del primer mandatario…
A Esquer la gente le había perdonado el ser un diputado “chapulín” o el asunto de los “moches”, por los que enfrenta una denuncia penal por desvío de recursos y enriquecimiento ilícito; pero será difícil que olviden el mal trato que le dio a una humilde familia y sobre todo el aventarles, incluida la ilegalidad que conlleva, todo el peso del gobierno y los medios a su alcance, dejando sin sustento y difamando por completo a este grupo de personas que ninguna culpa tenían del bochornoso descuido.
Ya para terminar, no podemos dejar de mencionar que en este lamentable asunto también están involucrados dos deplorables funcionarios que en cada oportunidad se empeñan en mostrar lo peor de sí mismos: uno el titular de reglamentos Humberto Nocedal quien presentó los argumentos por los cuales desmanteló el puesto, como retraso en los pagos de permisos y falta de condiciones para trabajar…
El segundo de ellos, funcionario del gobierno de Jalisco, a través de la Secretaría de Salud y quien se abandera como líder de los comerciantes ambulantes en Zapotlán, Antonio López Vázquez, quien según las denuncias presentadas, tuvo el descaro de amenazar a la familia de ambulantes que fue afectada por el alcalde y su esposa, para que se desistieran de las denuncias pues de lo contrario no les volverían a dar su permiso… Y todavía se dio el lujo de organizar una reunión de apoyo al alcalde.
No cabe duda que en este asunto el vendedor de churros y su familia están enfrentando a gente de la peor calaña, que son inhumanos, sucios y corruptos, que están utilizando todas las artimañas posibles para descalificarlos, pero por fortuna la sociedad les ha mostrado como nunca antes un tremendo respaldo que al paso del tiempo tendrá un alto costo en la imagen del mandatario municipal y su partido, pues hagan lo hagan ya se quitaron la máscara de hipocresía, esta vez por completo.
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