Punto por Punto; Sábado 20 de mayo de 2017
*No se mata la verdad matando periodistas
Es claro que nuestro país vive un grave clima de violencia y corrupción en todos los niveles, donde los sectores oficiales y no oficiales buscan a toda costa manipular la información y acallar a quienes se atreven a denunciar actos ilícitos que afectan a la sociedad.
Esta grave situación ha provocado que en lo que va del año hayan sido asesinados siete periodistas en territorio nacional, cifra que podría superar el fatídico año 2016 para el gremio de los comunicadores donde fueron asesinados 11 reporteros.
Por eso llama la atención y preocupa cómo la violencia en el país le pega a todos los sectores; desde una familia humilde, una joven estudiante que es asesinada a plena luz del día, un sacerdote en la catedral de la Ciudad de México acuchillado en el interior del templo, un periodista en Culiacán y en el municipio de Autlán el reportero Jonathan Rodríguez fue asesinado a balazos y su madre Sonia Córdova, subdirectora del semanario El Costeño, resultó gravemente herida.
Hay otros casos, como el de los siete periodistas de medios locales, nacionales e internacionales que fueron interceptados en un retén instalado en la carretera Iguala-Ciudad Altamirano, en la zona norte de Guerrero, por unos 100 civiles armados y encapuchados, que los despojaron de sus equipos de trabajo y pertenencias.
Todos estos hechos deben ser un llamado de atención para sociedad en general, pues privar de la vida a un informador no sólo es un homicidio condenable como tal, sino también la brutal cancelación de la libertad de expresión de la víctima y un grave atentado al derecho a la información de la sociedad.
También debe ser un llamado para los organismos encargados de la protección a los derechos humanos, pues tras estos lamentables hechos siempre los políticos y las instituciones de gobierno se apresuran a condenar lo ocurrido y dan a conocer una serie de acciones que en realidad son únicamente argumentos para hacer crecer el aparato burocrático.
Ahí está el caso de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, que presume su programa Alerta6, un mecanismo de acción rápida para atender e investigar las agresiones cometidas contra periodistas, pero lo cierto es que esa dependencia nacional al recibir una queja de periodistas que han sido sujetos de agresiones o amenazas, de inmediato se deshace de ellas y las canaliza a las comisiones estatales, luego éstas hacen lo mismo hasta que el asunto queda en el olvido.
En concreto, podemos decir sin temor a equivocarnos que las Comisiones de Derechos Humanos nacional, estatal y la oficina que opera en Ciudad Guzmán no han mostrado ningún interés en proteger y atender las denuncias presentadas por amenazas a periodistas, pues como si fueran una papa caliente se lanzan la bola de una a oficina a otra.
Así las cosas, habrá que ver si las medidas anunciadas la tarde del miércoles 17 de mayo por el presidente Enrique Peña Nieto son puestas en práctica para defender la libertad de expresión.
Mientras tanto, vale la pena recordar que el periodista Javier Valdez Cárdenas hace unos meses publicó un libro en el que narra la historia de terror que cientos de comunicadores, “son perseguidos, acosados, vigilados, torturados y asesinados no solo por el crimen organizado, sino también por aquellos que desde el poder aplastan todo intento de sacar a la luz las crudas verdades del México podrido”.
Y de su último libro también les comparto una frase lapidante: “Mientras mejor haces periodismo te vas quedando más solo”.
Ya en otro tema debemos mencionar que el regidor Roberto Mendoza Cárdenas dejará su posición en el cabildo guzmanense para asumir el cargo de director Jurídico en el Congreso de Jalisco; será sustituido por Adriana Esperanza Chávez… habrá que ver si esta joven hace un papel más decoroso que el ex candidato a la presidencia municipal, quien no mostró garra en el cabildo de Zapotlán como miembro de la oposición.
En un último tema hay que informar que los concesionarios del transporte público realizaron una reunión con el Secretario de Movilidad, y firmaron acuerdo para integrarse al sistema Ruta-Empresa, por lo que pronto el servicio de transporte en nuestra ciudad podría regularizarse.
Tal parece que los problemas del municipio tienen que ser resueltos desde la capital del Estado, pues aquí, al gobierno municipal y su equipo de bufones se les cae a pedazos la administración con broncas en el clausurado vertedero municipal, calles asfixiadas por obras mal planeadas y desde luego, falta de transporte por emitir permisos al margen de la ley.
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