*Elección 2021, Negocios y Redes de Poder
Varios factores dejan claro que las posibilidades de triunfo de Morena en el Sur de Jalisco son muy reducidas, pues históricamente, en el Estado hay un intenso conservadurismo e incluso una corriente de la ultra derecha que desde hace décadas mantiene el poder en el occidente del país.
Vale decir que las mejores oportunidades de la izquierda en Jalisco fueron en la década de los 90, cuando el PRD era un partido fortalecido por la corriente de Cuauhtémoc Cárdenas y sus representantes estatales, gente seria y muy preparada.
Pero fue precisamente en esa época cuando la ultra derecha se apoderó del gobierno estatal y mantuvo administraciones públicas por 18 años seguidos, expandiendo sus gobiernos a varios municipios del interior del Estado, y en casos como el de Zapotlán el Grande lograron gobernar tres periodos consecutivos.
Y no solo eso, pues al verse derrotados por el PRI, crearon una nueva corriente disfrazada de oposición, incluso, con tendencias de izquierda, pero que en realidad tenía en el fondo a todos los personajes del panismo tradicional: Movimiento Ciudadano.
En esa estrategia grandes empresas jaliscienses han invertido carretadas de dinero para mantener gobiernos a conveniencia, y es claro que en esta elección aplicarán la misma técnica para quitar toda posibilidad de triunfo a la izquierda.
Aunado a ello, hay que mencionar que el partido de la esperanza se enfrascó en una dura y ambiciosa pelea por el poder, cuya consecuencia fue una profunda división interna y el no haber postulado a los mejores candidatos.
Y no solo eso, la proliferación de partidos pequeños más que un asunto democrático es sin duda una estrategia para debilitar a la oposición.
Por eso no es de extrañar la participación de 13 partidos políticos en la elección de este año, varios de ellos por cierto de reciente creación y los cuales podrían tener incluso su debut y despedida.
En ese sentido, vale decir que en agrupaciones como Redes Sociales Progresistas y Somos sus candidatos son ex panistas que ya han encabezado varias posiciones de poder como alcaldías, diputaciones y secretarías.
Para explicarlo más claro, al presentarse como partidos de oposición se convierten en una alternativa para los ciudadanos cuya intención de voto es indefinida, y con ello, merman al partido grande que representa la única opción de triunfo como partido opositor del actual gobierno estatal: Morena.
Y sí, a los dueños de esos partidos no les importa que sus candidatos pierdan, pues ganan con el simple hecho de participar y mantener el registro, además de las prebendas que son negociadas en las cúpulas del poder.
Las elecciones llevan de por medio liderazgo, discurso, imagen y dinero, pero en la región los promotores de la cuarta transformación no se han dado cuenta de ello y están jugando una campaña caduca, utilizando los jingles y material publicitario de López Obrador cuando él ya está en el poder, pero ellos no.
El resto de los candidatos tampoco ha entendido esa batalla de poder y al contrario, los aspirantes se están mostrando débiles y con profunda falta de conocimiento sobre los problemas del municipio.
Del PAN hay que decir que no le preocupa la derrota, pues las cúpulas del partido tienen arreglado su asunto, mientras los acuerdos les sostengan sus posiciones de poder en el Congreso y el Poder Judicial, así como sus diputaciones plurinominales.
Del PRI sólo se puede decir que falta mucho tiempo para que se recupere del daño en su imagen que por varios años les fincó López Obrador y desde luego sus novedosos políticos que con la fuerza que llegaron, cayeron. Mientras que partidos nuevos y pequeños van a sacrificar a sus candidatos a fin de mantener su registro y de igual forma, dejar vigentes las cuotas de poder de sus dirigentes.
Por crudo y fantasioso que parezca esa es la realidad de la democracia en nuestro Estado, donde todos tenemos la oportunidad y el derecho de emitir nuestro voto, pero al final, son las cúpulas del poder empresarial e incluso religioso, las que definen quiénes serán nuestros próximos gobernantes.
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