Published on febrero 8th, 2013 | by lavozsur
0Consterna a Colima la Muerte de un Sacerdote que fue Asesinado a Golpes
Colima, Col., (Spé).- Honda consternación causó en esta entidad el asesinato del R.P. José Flores Preciado, de 83 años de edad, asesinado a golpes la noche del miércoles por desconocidos, cuando dormía en la Casa Parroquial que se encuentra anexa al templo de Cristo Rey, por la avenida José Antonio Díaz, en la Colonia Placetas Estadio de esta ciudad.
El religioso, originario de Tuxcacuexco, Jalisco y ordenado sacerdote el 16 de abril de 1961 en la Iglesia Catedral de Colima, fue encontrado tirado en el piso, aún con vida, con el rostro destrozado y lo trasladaron al hospital Regional Universitario, a donde llegó el obispo de la Diócesis de Colima, monseñor José Luis Amezcua Melgoza, tan pronto como le avisaron y le acompañó en sus últimos momentos, pues falleció mientras recibía atención médica.
Luego del deceso, el cuerpo fue trasladado al Servicio Médico Forense, para que le practicaran la autopsia correspondiente y conocer con certeza lo que provocó su muerte, aunque fuentes policiales anticiparon que el religioso presentaba traumatismo craneoencefàlico, ocasionado por un objeto contundente, al parecer un ladrillo.
Era un Religioso Bueno y Dedicado
El rector de la Basílica Menor de Colima, presbítero Jesús Mendoza Preciado, comentó a los medios que el asesinato del padre Flores es un hecho indignante, ya que se trataba de un sacerdote muy sano y su corazón siempre estuvo dispuesto a ayudar a sus semejantes; era un hombre bueno, de avanzada edad, que además de oficiar tres misas diarias en el templo de Cristo Rey, colaboraba todas las tardes, de lunes a viernes, en la Catedral y dedicó gran parte de su vida a la enseñanza de la lengua latina en el Seminario.
El R.P. Mendoza Preciado comentó que el martes alrededor de 15 sacerdotes celebraron una reunión en Quesería y que al terminar se fueron a comer a Tonila y regresaron juntos el padre Flores, otro religioso y él hasta el Cóbano, donde lo dejó y a las cinco de la tarde ya estaba en su parroquia confesando a varios feligreses.
“Es un hecho lamentable, la vida de un sacerdote es también como la vida de cualquiera de nosotros, una vida humana y en este caso le tocó a este sacerdote José Flores Preciado. Según he sabido fue un intento de asalto para robo; él vivía solo, dos seminaristas lo acompañaban, pero todavía no llegaban cuando fue atacado”, dijo.
La mañana del jueves, sus restos mortales fueron trasladados al templo de San José, que estuvo abarrotado de fieles, donde el obispo Amezcua Mendoza ofició una misa de cuerpo presente y se refirió a las virtudes del sacerdote asesinado, cuyos restos recibieron cristiana sepultura en el Recinto Morada de la Paz, en Villa de Álvarez.
Una Preocupante ola de Violencia
En el marco de este doloroso suceso, se recordó que en noviembre pasado, la titular de la Procuraduría General de Justicia del Estado, Tolanda Verduzco Guzmán se reunió en Suchitlán con casi un centenar de sacerdotes a quienes alertó ante las llamadas de extorsionadores a religiosos, pues el año pasado siete fueron amenazados, incluso con amagos de secuestro, entre ellos el padre Flores.
Y es que la violencia se ha abatido sobre el pacífico y tranquilo estado de Colima, donde en los primeros 37 días del año, se han registrado 42 asesinatos, balaceras y asaltos a comercios, y el miércoles 30 de enero pasado, en un predio cercano a la Laguna de Alcuzahue, Colima, en la zona limítrofe con Coahuayana, Michoacán, fue localizado calcinado y con huellas de tortura el cuerpo de una niña de 11 años de edad que cuatro días antes se había reportado desaparecida en Tecomán.
Entre los sucesos que más han sacudido a la opinión pública se encuentran los asaltos a gasolineras en la entidad, que el año pasado se contabilizaron nueve y a la sicósis se sumó el atentado a la ubicada frente al Parque Regional Metropolitano, en el centro de la ciudad, que el lunes a las 20.30 horas fue atacada a
balazos por tres sujetos que viajaban en un auto Ford Fiesta gris, sin placas, y que dañaron a la patrulla que aunque estaba cerrada debido a que había sufrido anteriormente tres atentados, se encontraba custodiándola con dos elementos que por fortuna resultaron ilesos.
La estación de servicio fue atacada por vez primera el miércoles 9 de enero pasado, por dos sujetos que viajaban en una motocicleta y que dispararon con rifles AK-47, de los llamados “cuernos de chivo”, la segunda fue el miércoles 16 de enero, cuando otros dos individuos que viajaban en un auto no identificado arrojaron bombas “molotov” contra el establecimiento y la tercera se registró el sábado 26 de enero, cuando dos atacantes en una motocicleta lanzaron nuevamente bombas “Molotov”.
Investigaciones Avanzan, Dice la Procuradora
Entrevistada por la prensa local respecto a estos hechos, la procuradora Verduzco Guzmán aseguró que ninguno de estos casos va a quedar impune y aunque declinó brindar mayores datos, aseguró que los resultados “seguramente van a satisfacer a la población”. Dijo que en su momento se darán a conocer datos sobre detenidos en el caso de la menor, en el que se esperan pruebas científicas “irrefutables”, pruebas genéticas que tardarán unos 15 días, pues se realiza “una investigación apegada a derecho y a la realidad”.
En lo de la gasolinera atacada en cuatro ocasiones, informó que aún no se tienen detenidos, pero se siguen dos líneas de investigación, aunque todavía no muy claras.
El 31 de enero pasado, el gobernador Mario Anguiano Moreno solicitó al presidente Enrique Peña Nieto en su más reciente visita a Colima una mayor presencia del Ejército y la Marina en el estado, principalmente en la zona de los municipios de Tecomán y Armería, que han sido severamente afectados por la presencia de grupos del crimen organizado.