Published on noviembre 26th, 2021 | by lavozsur
0“Llenemos de Alma Nuestra Palabra, Nuestros Estudios, Nuestras Vidas”
Discurso Pronunciado por el Doctor Vicente Preciado Zacarías al ser Nombrado Maestro Emérito de la Universidad de Guadalajara
Recibo esta nominación a nombre de todos los odontólogos que vendrán, fomentando con su esfuerzo el afán por el estudio y el conocimiento, pue si bien la vida en sus avatares mutiló mi infancia por falta de estudios primarios, estamos en un lugar donde otro zapotlense pintó con pinceles de fuego estos muros, ese artista, cuando era niño, le mutiló la mano un puñado de pólvora comprimida una noche de Zapotlán.
Esas mutilaciones, pienso, fueron simplemente una poda, una poda como la que recibe el árbol para lograr en sus frondas la promesa de la flor convertida en fruto y que en mí, en mi humilde persona, se puede concretar a dos palabras, el asombro y el misterio.
El asombro que me produce la palabra hablada, y el misterio que me asiste y me visita cuando estoy ante la palabra escrita. Y al ver que en el presídium y en el entorno que nos circuye a exalumnos míos, sólo puedo repetir aquellas palabras de Borges, “pido perdón, por haber enseñado lo que no sé a quienes sabrían más que yo”.
Y a todos ellos, y a todos ustedes les repito, ante el plúmbeo panorama que ensombrece al país, pues tal parece que los syrus que ensangrentaron la túnica de César se trasladan para nosotros al mes de diciembre, ante el entorno que vivimos lleno de inseguridad, vindita y violencia, ante la reducción del presupuesto a la Universidad por parte de los gobiernos, yo les digo, no nos levantemos en armas, levantemos como airosa oriflama el alma, el alma mater de nuestra Universidad, llenemos de alma nuestras cátedras, nuestra palabra, nuestros estudios, nuestro consultorio, almemos nuestras vidas y nuestras acciones, vistámonos de humanistas y salgamos a la calle a comprar nuestros libros, nuestro pan y nuestro vino, plenimunémos de humanismo las sendas a veces sombrías por donde transita nuestro rojo corazón.
Cubrámonos con el ropaje con que se han revestido los humanistas de esta noblísima Universidad, no importa que ese ropaje al principio nos quede grande, algún día a base de paciencia, perseverancia y humildad, nos quedará como nuestra segunda piel, porque nunca las sombras de la oscuridad, prevalecerán contra la luz, la luz del conocimiento y la razón, la luz del pensamiento y del trabajo, que son los lemas de nuestra Universidad.