Punto por Punto – Educación, Dinero y Poder
Los constantes enfrentamientos entre el Gobierno de Jalisco y la Universidad de Guadalajara van más allá de los 140 millones de pesos que le retiraron a la casa de estudios para la construcción de un museo, se trata de una lucha de poder que no es encabezada precisamente por Enrique Alfaro y Ricardo Villanueva… detrás de ellos están el propio presidente Andrés Manuel López Obrador y Raúl Padilla López.
Quizá la mayoría de las personas han venido interpretando este agarrón como un pleito por los 140 millones de pesos, (o al menos eso es lo que quiere hacernos creer la Universidad de Guadalajara), pero la realidad es que se trata de una lucha de poder donde el Gobierno Federal está buscando quitar el manejo de la Universidad a quien lo ha tenido por más de 30 años y que a costa de ello, ha creado una inmensa fortuna y un coto de poder comparable al de cualquier entidad del país.
Pero eso no es todo, pues si nos remontamos a la historia, hace unos años Raúl Padilla jugó políticamente contra el Movimiento de Regeneración Nacional al hacer alianza con el PAN, el PRD y el Movimiento Ciudadano, al reunir a los líderes de esos partidos con la finalidad de apoyar al denominado Frente por México, una acción que al parecer López Obrador no va a perdonar.
Raúl Padilla, además de haber sido rector, desde hace 30 años es líder moral de la Universidad de Guadalajara, donde ninguna decisión se puede tomar sin su consentimiento.
Aunado a ello, Padilla ha amasado una inmensa fortuna con empresas privadas que fueron edificadas al cobijo del presupuesto público… ahí están el Auditorio Telmex, el Centro Cultural Universitario, la Operadora de Estacionamientos, el Proulex-Comlex, la Feria Internacional del Libro, la Inmobiliaria Uniterra, la fabrica de software PIXVS, la Operadora del Parque Industrial Belenes y los Hoteles Villa Montercarlo y Villa Primavera entre otras.
A finales del 2017, en el marco de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara y en la antesala de los comicios del 2018, Raúl Padilla reunió en su domicilio particular de la Colonia Vallarta Poniente a los tres líderes nacionales de los partidos que formaban parte del Frente Ciudadano por México.
Por el PAN, asistió Ricardo Anaya Cortés; por el PRD, Alejandra Barrales Magdaleno y por Movimiento Ciudadano, Dante Delgado Ranauro, la intención era apoyar al Frente Ciudadano por México para que ganara la elección presidencial.
Ese fue quizá el mayor disgusto de López Obrador, pero seguramente ya escarbaron en las finanzas públicas y se han dado cuenta cómo en cada legislatura, se han venido gestionando cantidades millonarios para la consolidación de las empresas de la Universidad.
Quizá también por ello en su calidad de presidente de la República, Andrés Manuel López Obrador se lanzó en contra del presidente del Patronato de la FIL y acusó que las últimas ediciones de este evento fueron organizadas para generar críticas en su contra.
El mandatario se burló de que Padilla López haya acudido a recibir el Premio Princesa de Asturias que se le otorgó a la FIL y pidió a los reporteros que investiguen desde cuándo manda en la Universidad de Guadalajara.
Además de esos ataques, en los últimos años le han ido cerrando la llave de los recursos estatales y federales a Padilla, por lo que ha visto mermados los ingresos y desde luego, atorados los proyectos.
El presidente López Obrador ha demostrado en estos tres años de gobierno que no olvida los nombres de quienes han jugado en su contra y los que le impidieron llegar al poder en elecciones pasadas, a cada uno de ellos les ha estado cobrando esas viejas cuentas…
También hay que mencionar que la bronca entre Raúl Padilla y Enrique Alfaro es añeja, pues desde que fue alcalde de Tlajomulco, Enrique Alfaro declaró al municipio “territorio libre de padillistas”.
No fue una maniobra aventurada, pues desde ese entonces Alfaro contaba con el apoyo de Marcelo Ebrad, y el coordinador de los diputados en San Lázaro, Alejandro Encinas, así que el acuerdo, viene desde hace varios años.
Pero el pleito sigue en marcha, pues hace apenas un par de semanas, el presidente López Obrador acusó a Raúl Padilla de boicotear el regreso a clases presenciales, aseguró que impedir el retorno a las aulas más que una causa de salud tiene motivaciones políticas.
Así las cosas, hay que ver quién está en el trasfondo del pleito entre la Universidad de Guadalajara y el Gobierno de Jalisco, que si bien en apariencia ha sido protagonizado por el rector Ricardo Villanueva y el gobernador Enrique Alfaro, podríamos decir que sus manejadores son Raúl Padilla López y Andrés Manuel López Obrador.
Por eso, no dudemos que el fin de una era que ha durado alrededor de 30 años esté por terminar, pero antes de ello habrá una muy interesante lucha de poderes que llevan de por medio carretadas de dinero, la manipulación de los estudiantes y desde luego, un intenso manejo mediático.
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