Punto por Punto; Sábado 22 de julio de 2017
*Ayuntamiento, comunicadores y ecosistemas que se extinguen
El fracaso del Ayuntamiento de Zapotlán en temas trascendentales como la manifestación de los trabajadores de Aseo y la marcha atrás en la aplicación de las fotoinfracciones, es una muestra de la fragilidad con que se están tratando los grandes temas de nuestro municipio, los cuales al final de cuentas sólo muestran una gobernanza plagada de ilegalidad, desdén y burla disfrazadas por una mediocre representación mediática.
Como si fuera una escena del coronel creado por el escritor Gabriel García Márquez, quien colgaba escenografías de gente que lo vitoreaba a su paso, así se ha tratado de aparentar en Zapotlán que las cosas están bien; con un puñado de serviles comunicadores han tratado de comprobarlo, pero el ciudadano como nunca antes se ha manifestado contra esos malos manejos, y con muy buenos resultados.
Hace unas semanas tuve la oportunidad de charlar con un académico de la carrera de Periodismo en la Universidad de Guadalajara y comentamos las diferencias entre Comunicación Social (carrera que se imparte en el estado de Colima) y Periodismo (que es impartida en el Centro Universitario del Sur).
En esa charla hablamos cómo de forma sorprendente una buena parte de los comunicadores en Zapotlán se han convertido en voceros del Ayuntamiento, tomando incluso funciones que le corresponden a la oficina de Comunicación Social, como el convocar a conferencias de prensa o mandar la agenda del presidente municipal.
Y es que en ese afán por fortalecer ese débil cascarón mediático para captar la aceptación de la ciudadanía, la Administración Municipal no recurre únicamente a cuantiosos pagos en redes sociales, se recarga también en varios comunicadores que en ese afán de servicio están perdiendo su credibilidad…
Ya en otro tema, no podemos dejar de mencionar la alarmante situación que los agroproductores están provocando en varios municipios del Sur de Jalisco.
Como aves de rapiña, de forma ilegal están agotando valiosos recursos naturales como mantos acuíferos, agua potable destinada a uso humano y grandes extensiones de bosque, lo que ha motivado a varios alcaldes a alzar la voz en dependencias federales, pues es claro que a nivel estatal les están permitiendo hacer lo que se les antoje.
Hay denuncias de robo de agua potable, de provocar incendios forestales para luego sembrar aguacate, de perforar pozos sin permisos federales y de cambios de uso de suelo sin realizar los trámites correspondientes; mientras son escasas las acciones para detenerlos.
Y es que en el jugoso negocio del llamado “oro verde”, hay metidos políticos de todos los partidos, ejemplo claro son municipios como Gómez Farías, Tamazula y San Gabriel, donde diputados, ex secretarios de estado y ex gobernadores emanados del Partido Acción Nacional son propietarios de grandes extensiones de plantíos de aguacate y son también parte de estas irregularidades que los presidentes municipales han estado denunciando.
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